
Deslúmbrate con la historia dorada: el encanto eterno del oro.
Descubre el poderoso encanto del oro, el metal que ha dejado una huella imborrable en la historia de la humanidad.
Desde tiempos inmemoriales, este precioso metal ha sido venerado y apreciado, convirtiéndose en el tesoro deseado por los mortales.
Imagina una vista panorámica de la historia, donde el oro emerge como un metal divino, envuelto en misterio y leyendas.
Desde los amuletos que protegían a los antiguos gobernantes hasta las deslumbrantes joyas que adornaban a las reinas y reyes, el oro ha sido símbolo de poder, belleza y distinción a lo largo de los siglos.
El oro: un tesoro atemporal que impulsa el progreso y asegura el futuro.
Pero su influencia no se limita a la estética y el lujo. El oro ha sido una moneda de intercambio universal, un indicador económico que trasciende fronteras y culturas.
Incluso en la era moderna, este metal precioso sigue siendo un componente esencial en la tecnología de vanguardia, impulsando avances que transforman nuestras vidas.
La magia del oro también se manifiesta en su capacidad para resguardar el valor y ser una inversión segura.
En momentos de incertidumbre económica, el oro ha demostrado su solidez como refugio, ofreciendo estabilidad y protección a aquellos que confían en su resplandor duradero.

Un destello de distinción y estilo que ilumina el alma.
Sin embargo, el oro trasciende su utilidad práctica y se convierte en un símbolo de bienestar y estatus social.
Una joya de oro no solo adorna el cuerpo, sino que también ilumina el alma, transmitiendo un sentido de logro y éxito a quien la lleva puesta.
Es una declaración de distinción, una manifestación de estilo y buen gusto.
Descubre los secretos químicos del oro: un metal de ensueño que cautiva todos los sentidos.
El oro es representado por su símbolo químico Au y su impactante número atómico 79.
Este metal de transición se revela en un esplendoroso tono amarillo dorado intenso, despertando una admiración sin igual.
Pero lo que realmente distingue al oro son sus propiedades excepcionales.
Con un punto de fusión de 1064 grados Celsius y un punto de ebullición de 2970 grados Celsius, este metal precioso deslumbra con su resistencia al calor y su capacidad para perdurar a lo largo del tiempo.
No es de sorprender que el oro sea reconocido como el metal más maleable, permitiendo su transformación en placas extremadamente delgadas.
Su versatilidad es incomparable, convirtiéndolo en el material ideal para la creación de joyas. Cada golpe de martillo moldea el oro en formas exquisitas, capturando la belleza en cada detalle.
El oro: hilos de lujo que tejen obras maestras inmortales.
Pero la magia del oro no se detiene ahí. Es el metal más dúctil, capaz de convertirse en hilos infinitamente finos, dando vida a piezas de joyería delicadas y elegantes.
Su flexibilidad y maleabilidad permiten la creación de obras maestras que resisten el paso del tiempo, inmortalizando la esencia del lujo.
El oro desata un torrente de posibilidades creativas, en manos expertas se transforma en símbolo de distinción y elegancia.
Cada joya de oro es una obra de arte que trasciende las tendencias, iluminando a quien la lleva con un sentido de exclusividad y sofisticación.
Descubre el misterio químico del oro y adéntrate en un universo lleno de brillo y encanto.
Deleita tus sentidos con su esplendor y maravíllate con la eternidad que solo el oro puede ofrecer.

Descubre el poderoso fulgor del oro: un brillo solar que ilumina tu estilo
El color natural del oro, un amarillo intenso y vibrante es el reflejo de la energía y vitalidad que nos ofrece el sol, infundiendo nuestras vidas con un resplandor único.
La capacidad del oro para reflejar la luz con fuerza es una de sus propiedades más fascinantes.
Este metal precioso se convierte en un lienzo radiante, el soporte perfecto para engastar piedras preciosas que deslumbrarán con su seducción magnética.
Cuando las gemas se encuentran con el oro, una alquimia mágica ocurre. Las piedras, como estrellas brillantes en el firmamento, encuentran su hábitat ideal en este metal resplandeciente.
Juntas, crean una sinfonía de destellos y chispas que capturan miradas y despiertan admiración.
Imagina llevar una joya en la que el oro abraza a una piedra preciosa, entrelazando sus energías para crear una sinergia deslumbrante.
El oro actúa como un escenario radiante, realzando el brillo y la belleza de cada gema con su propio resplandor.
Permite que el oro se convierta en el compañero perfecto para tus gemas favoritas.
Con su toque de encanto solar, transformará cada joya en una obra de arte seductora, emitiendo una energía magnética que atraerá todas las miradas.
Descubre el poder cautivador del oro y deja que su brillo ilumine tu estilo con una intensidad deslumbrante.
¿Cuántos tipos de oro amarillo hay?
Si te preguntas cuántos tipos de oro amarillo existen, te sorprenderá descubrir que la respuesta se encuentra en una cuadrícula que mide la pureza de este preciado metal.
Aunque es común asociar el oro amarillo con la autenticidad, los diferentes tonos comparten el mismo criterio de quilates.
Entre los tipos de oro más populares destacan el de 9 quilates, 14 quilates, 18 quilates y 24 quilates. Ahora te explicaremos en qué consiste esta clasificación tan especial.
El oro de 24 quilates se refiere a una pureza total, donde las 24 partes que conforman este metal son oro puro, sin aleaciones con otros metales.
Sin embargo, es poco común encontrar joyas fabricadas únicamente con oro puro, ya que su naturaleza blanda puede hacer que se deforme, raye e incluso se rompa con facilidad.
Desde los primeros métodos de fabricación de joyas, se comprendió la necesidad de fortalecer el oro puro para asegurar su durabilidad, incluso con las herramientas más rudimentarias
Es así como surgen los quilates inferiores, como el oro de 9, 14 y 18 quilates. Estos tipos de oro contienen una proporción de oro puro combinado con otros metales, que les confieren mayor resistencia y durabilidad.
De esta manera, las joyas pueden mantener su brillo y forma a lo largo del tiempo, resistiendo los rigores del uso diario.
El oro de 18 quilates se distingue por su composición de 18 partes de oro y 6 partes de elementos de aleación. Esta combinación logra un equilibrio excepcional, ofreciendo una pureza significativa y una mayor resistencia.
Es un título de oro que derrocha elegancia y refinamiento, perfecto para aquellos que buscan un lujo excepcional sin sacrificar la durabilidad.
Si hablamos del oro de 14 quilates, nos encontramos con una mezcla de 14 partes de oro y 10 partes de elementos de aleación.
Por último, el oro de 9 quilates contiene 9 partes de oro y 15 partes de elementos de aleación, ofreciendo un equilibrio óptimo entre belleza y resistencia.
Si bien puede tener un menor contenido de oro puro, el oro de 9 quilates conserva su encanto y brillo característico.
Es una opción versátil y accesible que te permite lucir joyas de oro sin comprometer tu presupuesto.
Tipos de oro según marcas: garantía de pureza y calidad
A partir de 1975, se implementó una forma de expresar la pureza del oro mediante la marca en milésimas del peso total de la aleación.
Esta cifra en milésimas no solo representa la pureza, sino que también se convierte en la insignia que distingue a las joyas.
El uso de la terminología de quilates está regulado por la legislación de cada país, asegurando transparencia y confianza en la industria.
Por ejemplo, si consideramos una aleación de 1000 milésimas, donde todas son de oro puro, estamos hablando de 24 quilates, es decir, oro en su forma más pura.
Ahora bien, el título de la aleación de 18 quilates equivale a 750 milésimas. Esto significa que de las 1000 milésimas de la aleación, 750 son oro puro y las 250 milésimas restantes corresponden a elementos de aleación.
De manera similar, el título de 14 quilates se refiere a 585 milésimas de oro puro, mientras que las 415 milésimas restantes son elementos de aleación.
En el caso del oro de 9 quilates nos encontramos con 375 partes de oro por mil, la mitad que el oro de 18K.
Es el oro más popular para joyería en Inglaterra y poco a poco en España y demás países de Europa.
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Desde: 60,00€
Descubre la gama infinita de tonos en las joyas de oro, donde la creatividad se fusiona con la aleación perfecta
Más allá del clásico y vibrante tono amarillo, el arte de la joyería ha evolucionado para ofrecer una paleta de colores deslumbrantes. Desde el elegante oro blanco hasta la cautivadora tendencia del oro rosa, cada tonalidad tiene su propio encanto y personalidad.
Aquí te presentamos algunas combinaciones populares de oro y aleaciones, junto con sus resultados fascinantes:
- Oro puro + Plata fina + Cobre: el resultado es el distintivo oro amarillo, que conserva la intensidad y calidez del color natural del oro puro. Una elección clásica que nunca pasa de moda.
- Oro puro + Cobre + Zinc + Paladio: esta combinación da vida al exquisito oro blanco. Aunque su apariencia puede ser descrita como un gris claro con un leve tinte amarillento, su brillo metálico y su elegancia lo han convertido en una alternativa muy apreciada al platino.
- Oro puro + Cobre + Plata fina + Zinc: aquí surge el irresistible oro rosa. Con su suave matiz rosado, evoca romanticismo y sofisticación. Una opción perfecta para aquellos que buscan destacar con un toque de originalidad.
- Oro puro + Cobre + Plata + Zinc: esta combinación nos lleva al intrigante oro verde. Con su tonalidad amarilla y toques verdosos, es una opción audaz y única que seguramente capturará miradas admiradoras.
Además, existen combinaciones como oro puro + iridio o galio, que resultan en el enigmático oro azul, o la aleación de oro puro + aluminio en condiciones específicas, que nos ofrece el fascinante oro púrpura.
Sin embargo, estas tonalidades son delicadas y frágiles, por lo que su uso en joyería es limitado.
Pero la diversidad de tonos no se detiene aquí. Gracias a tratamientos superficiales aplicados por láser o técnicas galvánicas, el oro puede transformarse en un enigmático oro negro.